Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

I Crónicas 29, 18-28

18 Oh Yahveh, Dios de nuestros padres Abraham, Isaac, e Israel,
conserva esto perpetuamente para formar los pensamientos en el corazón de
tu pueblo, y dirige tú su corazón hacia ti.

19 Da a mi hijo Salomón un corazón perfecto, para que guarde tus
mandamientos, tus instrucciones y tus preceptos, para que todo lo ponga por
obra y edifique el alcázar que yo te he preparado.»

20 Después dijo David a toda la asamblea: «¡Bendecid a Yahveh,
vuestro Dios!» Y toda la asamblea bendijo a Yahveh, el Dios de sus padres,
se inclinaron y se postraron ante Yahveh y ante el rey.

21 Al día siguiente sacrificaron víctimas a Yahveh y le ofrecieron
holocaustos: mil novillos, mil carneros y mil corderos, con sus libaciones y
muchos sacrificios por todo Israel.

22 Aquel día comieron y bebieron ante Yahveh con gran gozo y por
segundo vez proclamaron rey a Salomón, hijo de David; le ungieron como
caudillo ante Yahveh, y a Sadoq como sacerdote.

23 Sentóse Salomón como rey sobre el trono de Yahveh en lugar de su
padre David: él prosperó y todo Israel le obedeció

24 Todos los jefes y valientes, y también todos los hijos del rey David,
prestaron obediencia al rey Salomón.

25 Y Yahveh engrandeció sobremanera a Salomón a los ojos de todo
Israel, y le dio un reinado glorioso como nunca había tenido ningún rey de
Israel antes de él.

26 David, hijo de Jesé, había reinado sobre todo Israel.

27 El tiempo que reinó sobre Israel fue de cuarenta años. En Hebrón
reinó siete años y en Jerusalén 33.

28 Murió en buena vejez, lleno de días, riqueza y gloria; y en su lugar
reinó su hijo Salomón.